Mantener la exclusión del Celta de Vigo y del Sevilla significaba el riesgo de una paralización judicial de las competiciones y la amenaza cierta de indemnizaciones millonarias a clubes implicados, patrocinadores y socios comerciales (televisión); riesgos similares se vislumbraban si los excluidos fueran el Valladolid y el Albacete, quienes, complementando los trámites tras la invitación recibida, camiseta de españa argumentaban haber adquirido el derecho a participar en la máxima categoría. Por su parte, vallisoletanos y albaceteños también presentaron sus alegaciones al Consejo Superior de Deportes (CSD) al considerar inaplicable la Ley de Procedimiento Administrativo por tratarse la Liga Nacional de Fútbol Profesional y la RFEF de entidades privadas, camiseta de españa demandando así que se reconociese su categoría una vez aceptada la invitación recibida y formalizada la inscripción conforme les camisetas de españa había sido requerida.